Sonia está preocupada por su hija Martina.
Ella tiene 10 años y saca excelentes notas en inglés.
Escuela bilingüe, tres años estudiando el idioma, excelentes pruebas… Todo parecía ir bien.
Pero cuando sus tíos vinieron de visita desde Estados Unidos y le hicieron preguntas simples como:
— How old are you?
— Do you like school?
— What did you do today?
Martina bajó la cabeza. No pudo responder ni una sola.
Su mamá pensó que tal vez estaba nerviosa.
Pero la respuesta de Martina la dejó helada:
“Mamá, no entendí nada de lo que dijeron”.
¿Cómo puede pasar esto?
Aunque parezca increíble, esto es más común de lo que pensamos.
Martina es una alumna aplicada. Aprende reglas gramaticales y vocabulario de memoria.
Saca buenas notas. Pero no habla inglés.
¿Por qué?
Porque aprender un idioma no es cuestión de repetir listas.
Se trata de interactuar y usar el idioma en contextos reales.
Las buenas notas no siempre significan dominio real del idioma
Muchas escuelas todavía utilizan métodos basados en largas listas de vocabulario y reglas gramaticales, técnicas que son efectivas solo para pasar pruebas, pero no para hablar inglés.
Un idioma se aprende de la misma manera cómo lo hicimos con nuestra lengua materna cuando éramos niños: interactuando, conversando, escuchando, equivocándonos, jugando.
No con listas, ni traducciones, ni pruebas escritas que se olvidan a la semana.
La memoria sirve. Pero no es el camino principal.
La buena noticia: Existe un método efectivo y comprobado
Estudios de universidades como Cambridge y Harvard confirman algo que nos encanta:
✅ Memorizar de forma aislada no ayuda a desarrollar fluidez.
✅ Los niños aprenden más rápido practicando en situaciones reales.
✅ La motivación y la diversión son claves para que el aprendizaje sea duradero.
Cuando los niños usan el inglés en experiencias significativas, logran:
✨ Confianza para hablar sin miedo
✨ Aprendizaje duradero y natural
✨ Más motivación y entusiasmo por aprender
¿Cómo lo hacemos en English4Kids?
Diseñamos un método 100% basado en cómo aprenden los niños de forma natural:
Storytelling: historias divertidas que conectan palabras con emociones.
TPR (Total Physical Response): usamos el cuerpo para reforzar el vocabulario, a través de juegos y bailes.
Mentalidad positiva: reforzamos la confianza para que pierda el miedo a equivocarse y no pare de avanzar.
Tu hijo no necesita memorizar 3000 palabras.
Necesita vivir el idioma, jugarlo, sentirlo, hablarlo.
Por eso nuestros alumnos:
✅ Hablan desde la primera clase
✅ Se divierten mientras aprenden
✅ Y realmente usan el inglés en su día a día porque interactúan con sus coaches.
Conoce el método correcto para tu hijo
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Gratis y sin compromisos.
Es la mejor forma de ver cómo tu hijo(a) puede disfrutar aprendiendo un nuevo idioma, y cómo la fluidez llega de forma natural cuando se siente seguro, motivado y feliz.
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